Factura de la luz: el 70% de los hogares no conoce la diferencia entre mercado libre y regulado
Casi el 70% de los hogares españoles no conoce la diferencia entre el suministro de electricidad en el mercado libre y en el mercado regulado. Así lo reflejan los datos del Panel de Hogares elaborado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Sin embargo, el porcentaje de conocimiento de la diferencia entre ambos mercados es el más elevado del registro aportado por la CNMC. En 2017, el primer año del que hay registro, el porcentaje de personas que conocían la diferencia entre el mercado regulado y el liberalizado no llegaba a una de cada cinco. Cinco años después ya se acerca a una de cada tres.
[¿Es más barato el mercado libre en la factura de la luz?]
En España hay dos modelos o dos maneras para calcular el precio de la energía: la que tienen los hogares que están en el mercado libre (el precio se fija entre particular y comercializadora) y la que tienen los hogares que están en el mercado regulado, conocido también como Precio Voluntario al Pequeño Consumidor o PVPC (aquí la OCU explica la diferencia entre ambas).
Como explica Abel Rodríguez, director técnico de la empresa especializada en eficiencia energética Inergya, a Newtral.es, “en el mercado regulado el precio de la electricidad depende de la fluctuación del mercado mayorista”. Mientras que en el mercado libre “la compañía marca un precio para el periodo establecido en el contrato”.
El 60% de los hogares no sabe dónde tiene contratada la tarifa de la luz
La falta de conocimiento entre ambos mercados no solo se queda ahí, sino que los consumidores tampoco tienen claro en qué mercado tienen contratado el suministro eléctrico.
El 60% de los hogares indicaron en la última encuesta de la CNMC que no sabían si tenían contratado el suministro eléctrico en el mercado regulado o en el mercado liberalizado. Mientras que el 10% afirmó tenerlo contratado en el mercado regulado y casi el 30% en el libre.
Desde el punto de vista de Rodríguez, este desconocimiento puede deberse a los diferentes cambios que ha habido desde la liberación del mercado eléctrico. Además, también incide en que se puede comprobar en la propia factura de la luz, ya que debe aparecer en un epígrafe.
Por su parte, Laura Cardenal, experta de Selectra, empresa especializada en la comparación de tarifas de energía, explica que “el sector energético es especialmente complicado y la factura demasiado cambiante, por lo que es totalmente normal que el usuario medio no sepa mirar lo que tiene contratado o qué diferencias hay entre mercados”. Para ello, desde el punto de vista de la experta “falta transparencia y estabilidad en las medidas para que la gente pueda de verdad familiarizarse con ello”.
Sin embargo, la diferencia entre el mercado libre y el regulado es importante para el bolsillo de los consumidores. Cardenal explica que la decisión del consumidor de un mercado u otro “dependerá de las necesidades de cada consumidor, por ejemplo, aquellos que tengan derecho al bono social siempre deberán permanecer en mercado regulado”.
Mientras que Rodríguez opina que “en circunstancias normales es mejor el mercado regulado que el libre”, ya que, “al no saber cómo se va a comportar el mercado, las empresas establecen un precio más elevado”.
Tal y como explicamos en este artículo, con datos también de la CNMC, entre 2015 y 2019 la factura regulada ha sido hasta un 17% más barata que la del mercado libre. Sin embargo, los máximos históricos alcanzados en 2021 amenazan la tendencia.
[Contador de la luz: descubre cuál es el precio de la luz cada hora]
Influencia del precio de la luz en los hábitos de consumo
Más allá del conocimiento entre la diferencia del mercado libre y el regulado, la encuesta de la CNMC también incide en los hábitos de consumo eléctrico, aunque aún no había entrado en vigor la tarifa de la luz basada en tres tramos horarios.
Aún así, dos de cada tres hogares ya afirmaban tener en cuenta la diferencia de precios en cada hora del día para realizar actividades como poner la lavadora, encender la calefacción eléctrica o el aire acondicionado.
Cada vez más hogares tienen en cuenta el precio de la luz para poder realizar acciones cotidianas. En el cuarto trimestre de 2015 poco más de la mitad, el 54%, de los hogares aseguraban tenerlo en cuenta.
En el segundo trimestre de 2021 ya el 42% de los hogares aseguraron tener “bastante en cuenta” el precio de la luz para adaptar sus hábitos de consumo; y un 26% indicó tenerlo “un poco en cuenta”.
Sin embargo, el 90% de los hogares que declararon tener una tarifa con discrimiación horaria afirmaron tenerlo en cuenta; el 66% bastante en cuenta y el 24% un poco. Dentro de los hogares con esta tarifa, el porcentaje de consumidores que tenían en cuenta el precio de la luz a cada hora se ha mantenido cercano al 90% desde 2017, y no ha sido inferior al 80%.
En cuanto a la capacidad de los consumidores para adaptarse a los precios de la luz, Rodríguez cree que con la aparición de la tarifa por franjas horarias “este porcentaje va a subir entre un 10 y un 15%, no tanto porque la gente sabía cuando eran las diferentes franjas, sino porque sabía cuando eran las baratas”. Además, el experto incide en que “la gente se ha tenido que adaptar porque no había más remedio”.
Por otro lado, Cardenal argumenta que “habrá que esperar a ver cómo evoluciona y si las personas han sido capaces de adaptarse”. Además, también explica que es “interesante” saber si aquellos que han adaptado sus hábitos debían hacerlo, es decir, “si aquellos que modifican sus hábitos de consumo son quienes tienen contratada este tipo de tarifas o si lo hacen también los que están mercado regulado y, por tanto, están modificando unos hábitos sin necesidad real de hacerlo”.
Fuentes:
- Abel Rodríguez, director técnico de Inergya
- Laura Cardenal, experta de Selectra
- Panel de Hogares - CNCM