El 70% de los españoles cree que la lista más votada debe gobernar y más de la mitad apoya una prima de diputados al ganador
La mayoría de los españoles consideran que la lista más votada debe gobernar, según la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicada este miércoles sobre cuestiones de actualidad. El sondeo se realizó con 2.357 entrevistas entre el 26 al 29 de abril, cuando ya se conocía el espionaje masivo a líderes independentistas con el software Pegasus aunque aún no se había hecho público que el espionaje también afectaba a los móviles del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y al de otros miembros del Ejecutivo.
Uno de los temas que aborda es el relativo a la propuesta para que gobierne la lista más votada en unas elecciones. El 70,1% de los consultados está a favor de esta medida frente al 24,3%.
No obstante, en el caso de equiparar el sistema español al de otros países como Grecia o Italia, en los que se otorga automáticamente una prima determinada de diputados o escaños a la primera fuerza electoral, la opinión se fragmenta, aunque más de la mitad de los españoles tiene una opinión favorable. Un 22,1% está muy de acuerdo, seguido de un 30,3% que se muestra bastante de acuerdo. Por el lado contrario, un 20,3% está bastante en desacuerdo y un 17,4% de los encuestados dicen estar totalmente en desacuerdo.
El PSOE, el segundo partido que más influye en la crispación política
La encuesta del CIS publicada este miércoles pregunta también a los españoles por quién tiene la culpa de la crispación política existente en España. Según el sondeo, a un 40,1% de la población le preocupa “mucho” la crispación política y a un 39,1% le preocupa “bastante”. En total, un 79,2% de los españoles está preocupado por la polarización.
De ellos, el 53,7% cree que son los políticos y partidos quienes más contribuyen a esta crispación, seguidos de los medios de comunicación y periodistas (un 11,8%). En contraposición, el CIS muestra que existe un 14% que opina que hay poca o ninguna crispación política en España o no dispone de suficiente información.
Además, sobre el total de los encuestados, al preguntar qué partido político está contribuyendo más esta crispación, el 11,5% de los españoles apunta a Vox, mientras un 10,8% cree que es el PSOE.
Por detrás del PSOE está el PP (un 6,2%) y Unidas Podemos (un 4,9%). También es notable el porcentaje de personas, (un 11,7%) que cree que todos los partidos contribuyen por igual a este clima político.
Para rebajar esta tensión, los entrevistados consideran muy importante que el PSOE y el PP alcancen pactos de Estado sobre materias clave en la política nacional (89,7%). De hecho, el 92,2% de los encuestados opinan que “los partidos políticos tienen la obligación de alcanzar consensos” en grandes asuntos.
La prioridad para los españoles es que se consiga un pacto sobre los precios de la energía (74,8%). Siete puntos por debajo, los españoles también quieren que los principales partidos alcancen acuerdos sobre la lucha contra la violencia de género (67,3%).
Le siguen la transición energética (64,4%), la política exterior en relación a la guerra de Ucrania (63,8%), la gestión de los fondos europeos (62,1%), las consecuencias económicas de la invasión rusa (61,2%), la renovación del Consejo General del Poder Judicial (56,8%) y la política exterior con Marruecos y el Sáhara (53,1%).
El CIS pregunta por el viaje de Sánchez a Kiev
El barómetro de este miércoles, el CIS ha preguntado por la el viaje del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a Kiev para reunirse con el líder ucraniano, Volodímir Zelenski. Un 76,2% de los encuestados responde que conocía ese viaje y una mayoría lo valora de forma positiva. La mayor parte de los entrevistados, un 56,1% sostiene que durante esa visita se corrieron los mismos riesgos que en otros momentos de la guerra. El CIS ha incluido en esta entrega hasta cinco preguntas sobre ese viaje de Pedro Sánchez.
El anterior estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas del 26 de abril preguntaba por la guerra en Ucrania. El sondeo mostraba la falta de credibilidad que la mayoría de los ciudadanos españoles dan a la información procedente de Rusia y el miedo ante una posible escalada del conflicto.